La Comunidad de Madrid tendrá representación en FINE 2023 #WineTourismExpo #Marketplace

Las comunidades autónomas están fijándose en el enoturismo, dado el éxito que estaban cosechando numerosas bodegas, para diversificar su oferta de actividades de ocio. En la cuarta edición de FINE #WineTourismExpo #Marketplace muchas regiones han decidido dar un paso y pedir un expositor para detallar su propuesto a las agencias y touroperadores. Dentro de las regiones participantes, la Comunidad de Madrid no quiere desaprovechar la oportunidad de dar a conocer su parte enológica.

Y es que a pesar de que todo el mundo conoce Madrid, poca gente sabe de la cultura en torno al vino en la capital de España y los demás municipios que conforman la Comunidad Autónoma. Madrid es la única capital europea que cuenta con una Denominación de Origen propia: Vinos de Madrid. A menos de una hora de la metrópoli existe una gran variedad de paisajes, bodegas y experiencias alrededor del vino, porque conocer el vino desde sus raíces es sumergirse en la cultura y formas de vida de un territorio y sus habitantes. Y Madrid tiene mucho que ofrecer en torno a sus vinos -ricos y variados en matices, aromas y sabores-.

Las típicas bodegas madrileñas son un perfecto lugar para perderse. // Fuente: Comunidad de Madrid

Una historia reciente pero con peso

La Comunidad de Madrid cuenta desde 1990 con la Denominación de Origen «Vinos de Madrid». Desde entonces, nuestra región empieza a destacar como destino ideal para el enoturismo. Con cuatro zonas diferenciadas: San Martín de Valdeiglesias, Navalcarnero, Arganda y El Molar, en las que se cultivan más de 8 000 hectáreas de viñedos, esta Comunidad cuenta con 51 bodegas con D.O. Vinos de Madrid y alrededor de 110 marcas de vino.

En 2022 un vino de la Comunidad de Madrid: Las Moradas de San Martín-Las Luces 2011, ha recibido por primera vez el galardón internacional Gran Bacchus de Oro. Además, en esa edición, otras diez creaciones elaboradas en la región han sido distinguidas en la cata a ciegas realizada por expertos mundiales, entre las más de 1.700 referencias que se presentaron, lo que demuestra la solidez de la oferta madrileña.

La historia de Madrid es la historia de su suelo, de su agricultura y sus viñedos en los que se combina tradición y vanguardia en las formas de producción. Los paisajes del Vino de Madrid nos trasladan a un pasado de tradiciones agrarias, porque el paisaje actual está modelado y es fruto del trabajo de los agricultores que se asentaron en tierras madrileñas.

Las salas de botellas dejan espacios encantadores para su visita. // Fuente: Comunidad de Madrid

Cuatro zonas con un encanto especial

En la zona de Arganda, tenemos uno de los mejores ejemplos de paisaje cultural en un enclave único: Aranjuez, declarado por la UNESCO Paisaje Cultural Patrimonio de la Humanidad; con su arquitectura rural, resultado de la interacción de la naturaleza y el ser humano. Regada por los ríos Tajuña y Henares, es tierra de huertas y cultivos que llenaron la despensa de la corte de los Reyes de España en los s. XVIII y XIX.

Importante valor paisajístico tiene también el área de Navalcarnero, tierra de campiñas y vegas, con sus llanuras características cortadas de norte a sur por el río Guadarrama. La subzona de Navalcarnero recoge los 19 municipios del área central sur de la Comunidad de Madrid. Las cinco bodegas adscritas a esta zona ofrecen variadas actividades ligadas al mundo del vino que permiten conocer el patrimonio cultural y natural de la zona.

Nada que ver con la zona de San Martín de Valdeiglesias, más accidentada y montañosa por influencia de la cercanía del Sistema Central. Dehesas, montes y pinares definen su paisaje de gran valor natural. Localizada en la ribera del río Alberche, acoge lugares de enorme valor arquitectónico, como el Castillo de Coracera, el monasterio de Santa María de Valdeiglesias o el Palacio de Villena, así como antiguas fuentes y abrevaderos, de interés histórico.

En 2019, El Molar fue aprobada por la Unión Europea como cuarta subzona de la Denominación de Origen Vinos de Madrid. Estas tierras se caracterizan por las condiciones climatológicas, la altura y el terreno de granito y pizarra, lo que le proporciona a la uva unas características especiales únicas. Ya en la Edad Media Temprana se pueden encontrar los primeros signos de la existencia de actividad vitivinícola, que se concretan en las Cuevas del Vino de El Molar. Las más antiguas, de origen árabe, datan de los siglos IX y X.

Las cuevas son el lugar donde reposan los Vinos de Madrid. // Fuente: Comunidad de Madrid

No todo es Madrid en la Comunidad de Madrid

Gracias al enoturismo, la Comunidad de Madrid puede desterrar el mito de que solo la capital puede ser fuente de interés para el resto de los visitantes nacionales e internacionales. Disfrutar de los Vinos de Madrid, así como de la variada gastronomía madrileña, conociendo los pueblos que fueron creciendo con las viñas y la riqueza económica que generaban, con sus encantadoras plazas, iglesias, monumentos, lavaderos, cuevas, bodegas subterráneas… es, sin duda, vivir la experiencia enoturística de forma diferente.

Son muchas las actividades que podemos disfrutar entorno al vino (recorridos temáticos, catas, talleres, picnics entre viñedos, etc.), preparadas para todos aquellos que quieran descubrir la riqueza vitivinícola madrileña y, a su vez, poder visitar el patrimonio cultural y gastronómico que ofrecen los municipios donde están enclavadas estas bodegas.

A través de las Rutas del Vino de Madrid el enoturista podrá descubrir los mejores rincones y los secretos mejor guardados de la región madrileña, deleitarse con los caldos de Madrid, y llenarse de su cultura, compartiendo sensaciones con su gente.