El Penedès, enoturismo de vanguardia, presente en FINE 2023

El Penedès es una región situada al sur de Cataluña, España, conocida por su producción de vinos de alta calidad. Con una tradición vitivinícola que se remonta al siglo VI a.C, el Penedès se ha convertido en una de las zonas vinícolas más importantes de España, y sus vinos se exportan a todo el mundo.

Gracias al clima, profundamente mediterráneo, con veranos cálidos y secos y inviernos suaves y húmedos y sus suelos principalmente calcáreos, con una gran cantidad de piedra caliza, la zona cuenta con un caldo de cultivo perfecto para la producción de uva. No en vano, en total se cuenta con 26.000 hectáreas de viñedos, siendo segunda zona vinícola más grande de España, después de La Mancha.

Las variedades de uva más comunes en la región son el Macabeo, el Parellada y el Xarel·lo, que se utilizan para producir el famoso vino blanco cava. También se cultivan uvas tintas como la Garnacha, la Monastrell y la Tempranillo, que se utilizan para producir vinos tintos de alta calidad.

El turismo del vino en Penedès

El enoturismo se ha convertido en una actividad cada vez más popular en el Penedés: Según los distintos informes económicos, este negocio ha crecido un 15% en los últimos años, y es una importante fuente de ingresos para la región. Una vez más, la Comarca estará presente en FINE #WineTourismExpo presentando sus distintas propuestas alrededor de este negocio, en boga en las últimas dos décadas.

Los viñedos no solo ofrecen un paisaje espectacular, sino que también brindan la oportunidad de conocer la cultura y la historia del vino.

En este sentido, hay una gran cantidad de bodegas y cooperativas vinícolas en la región que ofrecen visitas guiadas y degustaciones de vinos. Muchas de estas bodegas también tienen restaurantes que sirven comida tradicional catalana, lo que hace que la experiencia sea aún más completa.

El enoturismo ha generado un gran impacto económico en la región. Según un informe de la Asociación Catalana de Municipios del Vino (ACMV), el enoturismo en el Penedés generó en 2019 un impacto económico de más de 350 millones de euros y empleó a más de 4,000 personas. Además, la región ha recibido reconocimiento internacional por su excelencia en el enoturismo. En 2019, la revista británica Drinks International nombró al Penedés como la mejor región vitivinícola del mundo para visitar.

El turismo del vino también ha sido un catalizador para el desarrollo sostenible en la región. Muchas bodegas y cooperativas han adoptado prácticas sostenibles en la producción de vino y en la gestión de sus instalaciones turísticas. Algunas bodegas, por ejemplo, han instalado paneles solares para generar su propia electricidad, mientras que otras han introducido tecnologías para reducir el uso de agua en la producción de vino.

Además, el enoturismo ha fomentado el desarrollo de otras actividades complementarias, como el turismo rural y el turismo gastronómico. Muchas bodegas ofrecen alojamiento en sus instalaciones o tienen acuerdos con hoteles rurales cercanos. Además, se han creado rutas de senderismo y ciclismo que atraviesan los viñedos y conectan con otros puntos de interés turístico en la región.