Las experiencias enoturísticas de Pago de Carraovejas aprovechan el entorno natural y la cocina de la tierra muy ligadas a la cultura de “del campo a la mesa”, calidad vanguardia y respeto por lo tradicional.
En 1987 José María Ruiz encabeza junto con un grupo de segovianos amantes del vino el proyecto de crear una bodega en una buena zona de vinos tintos. El sitio elegido fue en la Ribera del Duero, en la localidad vallisoletana de Peñafiel, en las laderas de Carraovejas. Finca y bodega son hoy representantes de tradición e innovación, fruta y madera. El restaurante Ambivium es un espacio diferente en Peñafiel, ofreciendo cocina creativa con sabores tradicionales. Ubicado en las laderas del Pago de Carraovejas con unas vistas excelentes de la zona, forma parte de las propuestas para los visitantes.
Alma Carraovejas, Territorios líquidos, la mejor opción para descubrir la bodega y su filosofía. Una experiencia única enmarcada en un terruño singular; un territorio líquido destinado a armonizar el entorno, el conocimiento y el disfrute de los sentidos que te perimitirá vivir los procesos de elaboración desde su génesis en la propia bodega mientras disfruta de cinco vinos de los diferentes proyectos de Alma Carraovejas y cinco pequeñas elaboraciones representativas de una ‘cocina de paisajes’ junto a un vino de bienvenida.