En el corazón de la tradición vinícola española, las Bodegas Masaveu emergen como un símbolo de calidad y dedicación. Este conglomerado, que incluye bodegas en distintas denominaciones de origen como Rioja, Rías Baixas, Navarra y Castilla y León, representa la diversidad y riqueza del vino español. Cada bodega, con su carácter único, nos invita a un viaje sensorial extraordinario.

Entre ellas, Bodegas Fillaboa, situada en la D.O. Rías Baixas, destaca por sus extensos viñedos de Albariño y su pazo, repleto de historia y arte. La finca, con su leyenda que evoca a «La Cenicienta», aporta un toque mágico a la experiencia enoturística.

Bodegas Leda, por otro lado, ofrece un viaje a través del tiempo en Tudela de Duero, Valladolid. Su caserón señorial del siglo XIX es un testimonio de la historia medieval de la región en la elaboración de vinos.

La propuesta enoturística completa de las cinco bodegas se podrá conocer, con mucha más concreción los próximos 13 y 14 de marzo, cuando tenga lugar una nueva edición de Fine #WineTourism Marketplace.

Enoturismo: una experiencia inolvidable

El enoturismo en Masaveu Bodegas es una vivencia integral que trasciende la simple degustación de vinos. En cada una de sus bodegas, se ofrece una inmersión profunda en la cultura del vino, combinando la historia, la naturaleza y el arte.

Por ejemplo, en Bodegas Fillaboa, los visitantes pueden disfrutar de un paseo guiado por los viñedos y jardines del pazo, descubriendo la riqueza de la variedad Albariño y la belleza de su entorno. Esta bodega, con su historia que data del siglo XVII, no solo fascina por sus vinos, sino también por su patrimonio cultural, evidenciado en su colección de arte y su arquitectura señorial.

La propuesta enoturística se enriquece en las demás bodegas de Masaveu. Por ejemplo, Bodegas Murua, situada en la prestigiosa región de Rioja Alavesa, combina el arte y el vino de una manera única. Los visitantes pueden explorar la casa señorial entre viñedos, que alberga una impresionante biblioteca enológica y obras de arte que abarcan desde el siglo XVI hasta la actualidad. Este entorno, donde se funden la historia y la enología, proporciona una experiencia sensorial y educativa inigualable. La bodega, conocida por sus vinos de alta calidad, permite a los visitantes comprender mejor la filosofía y el meticuloso proceso de elaboración del vino de Rioja.

Por otro lado, Bodegas Pagos de Araiz en Navarra ofrece una experiencia enoturística que captura la esencia de la Denominación de Origen Navarra. Rodeada de un paisaje espectacular, la bodega invita a los visitantes a perderse en la vastedad de sus viñedos y a disfrutar de una cata de vinos que reflejan el carácter y la tradición de la región.

Aquí, el vino se convierte en el narrador de una historia que abarca desde la antigua ciudad medieval de Olite hasta las modernas técnicas de vinificación.

Cada visita a Masaveu Bodegas es una oportunidad para sumergirse en un mundo donde el vino, la naturaleza y el arte se entrelazan de manera sublime, creando experiencias únicas e inolvidables.

Arte, historia y vino: la combinación perfecta

Masaveu Bodegas no solo se destaca por sus vinos excepcionales, sino también por su compromiso con el arte y la historia. Las visitas a sus bodegas son un recorrido por siglos de cultura vinícola y arte. Desde las obras de arte en Bodegas Murua, en la Rioja Alavesa, hasta los paisajes vibrantes de Bodegas Pagos de Araiz en Navarra, cada visita es una celebración de la fusión entre el vino, el arte y la naturaleza.

En definitiva, como antesala a qué se verá en FINE el próximo mes de marzo, Masaveu Bodegas ofrece una aventura enoturística sin igual. Las visitas a sus bodegas no son solo una degustación de vinos, sino un viaje a través del tiempo y el arte, donde cada sorbo lleva consigo la esencia de la tierra y la pasión de generaciones.