Desde su fundación en 1926 por Abel Pereira da Fonseca, Quinta do Sanguinhal se ha destacado por innovar en el panorama vinícola de Portugal. Con la plantación de las primeras viñas extremas, alineadas y sin árboles frutales intercalados, Pereira da Fonseca comenzó una revolución en la agricultura vitivinícola.

La introducción de nuevas castas y la plantación de un talhão dedicado a la experimentación, aún conocido como «experiencias», demuestra un legado de curiosidad y excelencia.

Este legado se extiende más allá de sus vinos, influenciando el enoturismo y dejando una huella cultural en la región, marcada por figuras como Fernando Pessoa y su hábito de visitar la ‘casa Abel’ para disfrutar de un buen vino.

La quinta está compuesta por tres fincas que destacan no solo por su producción vinícola, sino también por su rica historia y contribución cultural.

La Quinta do Sanguinhal, con su producción de vinos DOC Óbidos y IG Lisboa, y la Quinta das Cerejeiras, productora del renombrado Quinta das Cerejeiras Grande Reserva, representan la excelencia vitivinícola. Mientras tanto, la Quinta de São Francisco, fuente de los vinos más premiados de la región, refleja la pasión y dedicación de la familia Pereira da Fonseca por la viticultura.

La experiencia enoturística en Quinta do Sanguinhal

La propuesta enoturística de la bodega es una invitación a sumergirse en más de cien años de historia vitivinícola.

El enfoque está puesto en ofrecer una experiencia genuina y enriquecedora, alejada de los circuitos turísticos convencionales. Los visitantes son recibidos por la propia familia Pereira da Fonseca y guiados por las instalaciones históricas de la quinta, que incluyen una de las destilerías más antiguas de la región y un monumental lagar con prensas de fuso y vara, testigos del pasado y presente vinícola del lugar.

Las experiencias no se detienen allí: la quinta ofrece catas exclusivas de sus vinos, paseos por sus jardines del siglo XIX y visitas a las antiguas instalaciones que hoy albergan un núcleo museológico.

Cada detalle está pensado para conectar al visitante con la rica herencia de Quinta do Sanguinhal y su entorno natural, único por la influencia del microclima de la Serra de Montejunto y el Atlántico.

La integración de historia y modernidad

En la Quinta das Cerejeiras, la familia Pereira da Fonseca ha integrado la historia y la modernidad de una manera que encanta a todos quienes la visitan. La casa de Abel Pereira da Fonseca, diseñada por el arquitecto Norte Junior, es un símbolo de la arquitectura portuguesa de principios del siglo XX. Mientras tanto, la Capela Madre de Deus, con su historia que se remonta al siglo XVI, se mantiene como un tesoro cultural, disponible para el disfrute de los visitantes gracias a la generosidad de la familia.

Quinta do Sanguinhal no solo celebra su rica historia y producción vinícola, sino que también se posiciona como un espacio excepcional para eventos corporativos y sociales.

Con instalaciones versátiles que pueden albergar desde seminarios hasta grandes celebraciones, la quinta combina su legado vitivinícola con la hospitalidad y la capacidad de ser el escenario de memorables eventos.

En FINE #WineTourism Marketplace, que se celebrará los próximos 13 y 14 de marzo de 2024, los asistentes tendrán la oportunidad de conocer más a fondo la propuesta enoturística de Quinta do Sanguinhal. Les invitamos a descubrir el encanto y la tradición de una de las más distinguidas representantes del enoturismo en Portugal.