La empresa Robotrónica, una división de Juguetrónica, presenta a Pepper en INTUR, un robot humanoide diseñado para interactuar con personas que es capaz de detectar el lenguaje verbal y no verbal e incluso de reconocer el estado emocional de su interlocutor.
Pepper imita los gestos humanos, se desplaza y en sus intervenciones emplea un elaborado “lenguaje corporal” que genera empatía con el interlocutor e intensifica sus discursos e interacciones.
Es un ejemplo de cómo insertar los robots en entornos comerciales, donde pueden realizar labores de recepción, recogida de datos, reconocimiento de caras, llamadas de teléfono y mails, mapa de espacio, big data, etc.