Bilbao, con el museo Guggenheim como gran símbolo internacional, es la puerta al universo cultural vasco. La ciudad, que ha sabido reinventarse a sí misma, combina rincones con encanto con un ambiente cosmopolita y una oferta museística inigualable. Recorrer el Casco Viejo, declarado Monumento Histórico-Artístico, es entrar en un entramado de calles con 700 años de historia. En el paseo verás la Catedral de Santiago, la Plaza Nueva y las Calzadas de Mallona. No te pierdas la Iglesia de San Antón, con su puente que integra el escudo de Bilbao, el Mercado de La Ribera, todo un símbolo de la ciudad, los jardines del Arenal, el emblemático Teatro Arriaga… Una larga lista te espera.